jueves, febrero 18, 2010

¡Que se quede en Cuba!

Fue el grito a lo largo de la avenida 9 de Octubre el jueves pasado. “¡Que se quede en Cuba!”, gritaba una señora agitando una bandera celeste y blanco. “¡Que se quede en Cuba!”, coreaban estudiantes con puños en alto. “¡Que se quede en Cuba!”, una y otra vez.

Cuba es la falta de libertad. Caudillismo, abusos, desesperanza, violencia, encierro. Un modelo fracasado. Y sin embargo, tenemos un presidente que describe la eterna dictadura castrista como una democracia. Que alaba ese régimen ignorando todos los abusos y ataques a la libertad que ahí se dan.

Por eso, el grito “¡Que se quede en Cuba!” va más allá del deseo literal de miles de guayaquileños de que Rafael Correa se quede en esa isla donde se operaba su rodilla. El grito le dice a Correa que si tanto admira el modelo cubano, que se quede en La Habana, pero que no intente imponérnoslo acá.

Hoy lo vemos con mayor claridad en Venezuela. Chávez cree, como Castro, que el país le pertenece. Que tiene el derecho a interferir en todo. A quitar lo que con esfuerzo otros han ganado. A perseguir y callar al que se opone.

Y aunque Correa amaga alejarse de Chávez, no demuestra ser distinto. Nada indica que su camino será más respetuoso de la ley y los individuos. Tal vez a Correa le incomode el triste y abusivo papel que juega Chávez en Venezuela. Seguramente a la mayoría de sus partidarios de Alianza PAIS les avergüence tener lazos tan fuertes con la dictadura chavista. Pero no nos dan mensajes contundentes y peor aún acciones que demuestren que estas comparaciones de Correa con Chávez son equivocadas.

La parcializada y abusiva cobertura que hicieron los canales de televisión gubernamentales de la marcha en Guayaquil sirve de botón. En lugar de permitir un manejo independiente de los medios incautados, el Gobierno manipula descaradamente el contenido de medios de comunicación que nos pertenecen a todos los ecuatorianos. Siguen el método cubano y venezolano de controlar y manipular la información, meter al Gobierno hasta en la sopa, vendernos una fantasía en la que el Gobierno y su líder son los salvadores, esconder la verdad. ¿Hasta cuándo maneja el Gobierno los canales incautados? ¿Cuándo tendrá la mínima decencia de ponerlos a la venta?

Si Rafael Correa quiere demostrar que es democrático y que está lejos de Cuba, en su cadena de este sábado podría, por ejemplo, anunciar que los canales incautados deben venderse cuanto antes, este mismo año. Y a manos privadas, nada de esas falsas ventas a ministerios o entes públicos. Sería un buen comienzo para probarnos que él no es como Chávez ni Castro. Que él sí respeta la ley y la libertad individual. Que en Ecuador nunca llegaremos a lo que hoy vive Venezuela y ya ha vivido Cuba.

Pero si eso no ocurre. Si no hay mensajes o acciones que separen a Correa de sus maestros caribeños, entonces se encontrará cada vez con muchas más personas que le gritarán en coro que se quede en Cuba. Que acá queremos libertad. Que el país y la región están cambiando, despertando del letargo socialista-autoritario. Que no nos vamos a dejar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

siempre leo tu columna. el jueves son dos que espero, la de emilio palacio y la tuya. y cada vez que termino de leerla me quedo pensando, a veces con optimismo, otras con desaliento y me digo, cuando este en la compu me uno al debate que seguramnete se forma en el blog de gomez lecaro. pero cuando llego a la compu, por una razon u otra, termino olvidándome del asunto, hasta que, luego de haber cerrado sesión veo el periodico tirado en la sala y me acuerdo de golpe, me digo, chuta, que idiota, en la proxima, sí, le dejo su comentario. y te juro que he jurado muchas "la próxima".

pero mas me sorprende no encontrar comentarios, lo cual, cuando no preocuparte, me deja pensando, será que la gente es bruta y no se forma lo que se llama, opinion publica? espero estar equivocado.

iba a decir.

hm....

ya se me olvidó. supongo que por eso es comprensible del porque olvido siempre entrar al blog.

****varios minutos despues de profunda reflexion.

ya me acordé. quisieras que escribieras o analizaras o lo que vendria a ser lo mismo, que comentases sobre el ARTICULISTA IDIOTA. lo pongo en mayusculas a pesar del mal gusto que todo el mundo atribuye ((entre ellos yo)) a quienes escriben en mayúsculas, pues a despecho de lo que no es, se da a entender que el que grita en mayusculas sufre por hacerse entender. pero lo mio es otro caso, lo que intento es poner al articulista idiota en un sentido que digamos mayúsculo, en un sentido que el articulista idiota es un profesional de la idiotez. y que como buen entendido en ella, le da un uso bastante particular.

quisiera que analizaras sobre qué motiva a la gente a ser idiota. no me refiero al idiota de la calle, que escupe y anda haciendo cagadas por ignorante y bruto, no, yo digo un idiota ilustrado, un idiota que sabe que esta mal, el idiotiado por el veneno, como xavier flores, por ejemplo.

de allí saldria algo muy interesante, porque la verdad es que yo leo a xavier flores y a los pusilánimes por el estilo y perdóname la expresion despectiva "culturosos" porque es una manera de rebajar a los intelectuales de pacotilla como los que escriben en diario el telegrafo y medios similares.

en fin, espero respuesta.

chau.

ricardo weblog.

ricardoweblog.blogspot.com