jueves, agosto 04, 2011

Avergonzados

Y me avergüenzo, como tantas veces, viendo a nuestros políticos hacer el ridículo. Nuestros asambleístas de hoy son los mismos diputados de ayer, solo que con nombre distinto, como todo en esta falsa revolución, que cree que el cambio se logra con nuevas etiquetas, nuevo eslogan y un comercial en la tele con gente sonriente.

Y me avergüenza ver que muchos de los falsos revolucionarios tienen más o menos mi edad. ¿No se suponía que los jóvenes seríamos distintos? Da igual. El Corcho ordenando que se anule la votación, alguna vez fue joven también. Correa abusando de su poder para callar a los medios fue joven hasta hace poco, antes de convertirse en otro viejo político. Y me avergüenzo escuchándolos, tan acostumbrados a vender sus mentiras gigantes por verdades, que ya ni se inmutan, ni nos inmutamos.

Enciendo la radio en mi carro. Quiero ejercer mi elemental derecho a escoger una estación que me guste. Pero no puedo. El Gobierno me lo impide malgastando nuestra plata en otra cadena. Suenan los ladridos de la Secretaría de Comunicación, la Secom, que debería sincerarse y llamarse por lo que es: la Secretaría de Coerción y Manipulación. Se meten en nuestras vidas para atacar y manipular.

El mundo entero condena el abuso de este Gobierno. “Autócrata” y “populista errático” lo llama a Correa el Washington Post. Si el tiempo que Correa dedica a escarbar opiniones en la prensa y criticar a coloraditas en noticieros se lo diera a temas importantes otra sería la situación. Olvida que su papel como presidente está por encima de las críticas que todo político recibe, aquí y en cualquier país.

Correa repitió este sábado que no ha usado su calidad de presidente para demandar. Que se puso al nivel de cualquier ciudadano. Y como cualquier ciudadano ordena cadenas nacionales que todos pagamos. Y como a cualquier ciudadano en pocas horas el juez le otorga 40 millones de dólares. Nunca ha sido tan rentable ser cualquier ciudadano.

Y prendo la tele y la apago al instante. Ver entrevistas políticas en este país se vuelve un acto masoquista. Quedan las opiniones sinceras en Twitter, ese espacio todavía libre que el Mashi Rafael y sus amigos no pueden controlar o interrumpir con amenazas y cadenas repetidas hasta el cansancio.

Y me avergüenza ver cómo nos acostumbramos. Nos adaptamos a los nuevos tiempos, a pesar de los abusos. Agachamos la cabeza. Que lo de EL UNIVERSO no es asunto nuestro. Es cosa de sus dueños. Que hay muchos contratos con el Gobierno por ganar. Que hay que estar de buenas con ellos, para ser parte del reparto. Mejor no escribas en el Diario, para qué complicarte la vida. Mejor quedarse callado. Mirar para otro lado. Esperar que no nos toque. Hacerse amigo de los poderosos de hoy. O al menos pasar desapercibidos hasta que todo esto haya terminado. ¿Podemos quejarnos actuando así?

Quien sabe cuánto tiempo tendrá que pasar. Cuántas nuevas vergüenzas y abusos tendremos que soportar. Pero toca ser necios y seguir creyendo. El país está tocando tan bajo, que hay más gente reaccionando, uniéndose, participando. Gente que se niega a que unos pocos nos sigan avergonzando.

2 comentarios:

Leovanna dijo...

A mí también me avergüenza!

Anónimo dijo...

"Lo que empieza en cólera acaba en vergüenza" - Benjamin Franklin

"Un caballero se avergüenza de que sus palabras sean mejores que sus actos" - Confucio. Filósofo chino.

"Allí donde el mando es codiciado y disputado no puede haber buen gobierno ni reinará la concordia" -Platón

"Los buenos gobiernos se conocen cuando lo que hacen vale más que lo que sus opositores dicen" - Antonio Maura y Montaner, Estadista español

"Al hombre que hace todo lo que puede no podemos decirle que no hace todo lo que debe" - Fray Antonio de Guevara. Escritor y eclesiástico español